dimarts, 11 de juny del 2013

Perdidos en medio de Irlanda

      Bueno, perdidos entre comillas. lo de perdidos se suele decir cuando uno esta des ubicado ¿no? Yo lo digo en otro sentido:  En cada momento, sabemos donde estamos, pero nunca sabemos de cierto que nos vamos a encontrar más adelante.  Los caminos de Irlanda  aguardan sorpresas a cada instante. Sorpresas, que este país cuajado de verde, en todas sus tonalidades, invadido de pequeñas rutas boscosas, y pintado de azul por las aguas que lo cruzan y por las tortuosas costas que lo bañan, es un país que viste de domingo todos los días del año. Que luce sus mejores galas, y en dónde sus habitantes viven al parecer acostumbrados a estas lluvias que por cierto son el motivo de que aquí la madre naturaleza se contonee ante nosotros con orgullo y desparpajo.
  Las ovejas, entre los pastos, así como los caballos, las vacas, todo ello parece estar en el sitio que le corresponde. en las ciudades, el bullicio de las gentes, es,como en todas partes, al fin y al cabo bullicio, pero aquí, el Irlandés es amable, cotidiano y servicial. Se ofrecen para ayudarte. Te acompañan a los lugares para mostrártelos e incluso si no te entienden intentan hacerse entender con mímica o en francés, idioma que creo deben haber estudiado aquí muchos de los irlandeses de pequeños. En fin...Estoy en el bar del Museo Country. Liverpool, un lugar encantador, con un lago  artificial, y jardines de esos de cuentos de hadas, o de brujas, según el ánimo que tenga uno. Un bar en el que he encontrado wifi, así. Que me he puesto a escribir. Me gustaría poder hacerlo más a menudo en el transcurso de este idílico viaje, pero hasta hoy catorce días después de salir de casa no he encontrado el lugar idóneo para escribir.....Ahora pagaremos la cuenta y entraremos en el museo, que seguro vale la pena.